Qué es el tráfico de influencias y cómo puede afectarte legalmente
El tráfico de influencias es un delito que atenta directamente contra la Administración Pública y la confianza de los ciudadanos en el correcto funcionamiento de las instituciones, que se presupone que deben actuar de manera objetiva.
Qué se entiende por tráfico de influencias
Para comprender qué es tráfico de influencias hay que dirigirse a los artículos 428 a 431 del Código Penal.
En este delito, una persona se aprovecha de su posición personal o profesional para influir en la actuación de un funcionario o una autoridad pública, con el fin de conseguir un determinado resultado. La influencia puede ser directa, indirecta, real o fingida, pero su finalidad debe ser obtener una ventaja o beneficio, generalmente de tipo económico.
En el Código Penal el tráfico de influencias queda configurado como un hecho que pueden cometer tanto los funcionarios públicos como los particulares. Se tipifica, además, un supuesto en el que el sujeto activo se ofrece a ejercer influencia a cambio de dádivas, presentes u otra remuneración.
Tráfico de influencias, ejemplos
- Un empresario paga a un conocido para que hable con un alto funcionario, a fin de lograr la adjudicación de un contrato público.
- Un abogado utiliza su contacto con un juez para que su cliente obtenga una sentencia favorable.
- Un político solicita a otro que interceda ante una Administración para facilitar la contratación de una empresa amiga.
Cuándo se considera que existe un delito de tráfico de influencias
Los elementos que definen a este tipo delictivo son:
Existencia de una influencia
No necesariamente tiene que ser efectiva o real, basta con que el autor del delito asegure que tiene capacidad para influenciar, aunque no la tenga. Lo relevante es que intenta aprovechar esa situación para conseguir un resultado concreto.
Intención de alterar una resolución pública
El objetivo que se persigue es alterar el contenido o resultado de una actuación administrativa o judicial. Por ejemplo, conseguir una concesión, una autorización administrativa o una resolución judicial.
Finalidad lucrativa o ventajosa
El actor persigue un beneficio económico que puede ser directo o indirecto, para sí mismo o para una tercera persona.
Voluntariedad y conciencia del acto
El delito de tráfico de influencias es doloso. El sujeto activo debe tener conocimiento de lo que está haciendo y voluntad de influir de manera indebida en una decisión. No cabe, por tanto, la comisión por imprudencia.
Esto hace que no cualquier recomendación o sugerencia se considere como un delito de tráfico de influencias. Por ejemplo, si un político remite el currículum de un familiar a una empresa pública, pero sin presionar ni condicionar la decisión de contratación, no se puede considerar que se esté cometiendo este hecho delictivo. En cambio, si presiona a la empresa pública con intención de alterar el curso normal del proceso de decisión de contratación, entonces sí hay tráfico de influencias.
Qué consecuencias legales puede tener este delito
La pena varía en función de la condición que tenga el autor:
Si el autor es un funcionario público
- Pena de prisión de seis meses a dos años.
- Multa del tanto al duplo del beneficio perseguido u obtenido.
- Inhabilitación especial para empleo o cargo público y para el ejercicio del sufragio pasivo, por tiempo de cinco a nueve años.
- Si, además, se ha conseguido el beneficio perseguido, estas penas se imponen en su mitad superior.
Si el autor es un particular
- Pena de prisión de seis meses a dos años.
- Multa del tanto al duplo del beneficio perseguido u obtenido.
- Prohibición de contratar con el sector público; pérdida de la posibilidad de obtener subvenciones o ayudas públicas; pérdida del derecho a gozar de beneficios o incentivos fiscales y de la Seguridad Social, por tiempo de seis a 10 años.
- Si se ha conseguido el beneficio perseguido, las penas se imponen en su mitad superior.
Si la responsable es una persona jurídica
- Multa de seis meses a dos años.
Si el delito consiste en solicitar algo a cambio de ejercer tráfico de influencias
- Pena de prisión de seis meses a un año.
- Si el autor es una autoridad o funcionario público, se impone además una inhabilitación especial para cargo o empleo público y para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo por tiempo de uno a cuatro años.
Qué hacer si te acusan o estás involucrado en un caso de tráfico de influencias
Si estás involucrado en un proceso penal relacionado con el delito de tráfico de influencias, lo mejor es seguir estos pasos:
- Busca asesoría legal especializada. Contacta con un abogado penalista que tenga experiencia en delitos contra la Administración Pública, para que se encargue de estructurar una defensa sólida.
- Evita hacer declaraciones. Estos casos suelen tener repercusión pública, pero es mejor no dar declaraciones ni ante la Policía ni ante los medios sin haber sido aconsejado antes por tu abogado.
- Reúne pruebas exculpatorias. Prepara los medios de defensa que te ayuden a demostrar que no existió la conducta de la que se te acusa: correos electrónicos, testimonios, etc.
El delito de tráfico de influencias puede tener consecuencias penales graves. Por eso, necesitas un abogado especializado en esta materia para contar con una buena defensa. Si necesitas mi ayuda, estoy a tu disposición contacta conmigo para asesorarte
Abogado especialista en derecho penal
Colegiado por el Ilustre Colegio de Abogados de Madrid (nº 131239 )